La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó este lunes que su gobierno mantendrá una relación sólida y respetuosa con el próximo mandatario o mandataria de Estados Unidos, sin importar el resultado de las elecciones de este martes. En su conferencia matutina, Sheinbaum Pardo destacó el compromiso de su administración para trabajar en colaboración con quien asuma la presidencia del país vecino, subrayando el respeto por la decisión democrática de los estadounidenses.
Una relación basada en el respeto y la cooperación
«Habrá una buena relación», expresó la presidenta, al tiempo que reiteraba que el gobierno mexicano respetará el resultado electoral estadounidense. «Vamos a esperar la decisión de los órganos electorales de Estados Unidos. En el momento en que se declare un resultado definitivo, estaremos listos para establecer la relación y estoy segura de que será una buena relación», enfatizó la presidenta.
Sheinbaum Pardo hizo hincapié en que su administración se mantendrá al margen hasta que se completen todos los procedimientos electorales en Estados Unidos, evitando cualquier interferencia prematura en el proceso. La gobernante mexicana aseguró que, una vez definido el escenario, trabajará de la mano con su homólogo o homóloga en Washington, continuando una política de cooperación y respeto mutuo.
El T-MEC: una alianza comercial clave para el gobierno de Sheinbaum
Durante su intervención, Sheinbaum Pardo también destacó que México ya ha avanzado en su relación con actores clave de Estados Unidos, incluidos empresarios y funcionarias del gobierno, con un enfoque particular en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Este acuerdo comercial es vital para México y, en palabras de la mandataria, su administración ha trabajado «de forma muy importante» para fortalecer las relaciones trilaterales, promoviendo un intercambio que impulse la economía regional y beneficie a las tres naciones.
El T-MEC representa una columna vertebral en la relación de México con Estados Unidos y Canadá, regulando no solo el comercio de bienes y servicios, sino también aspectos laborales, medioambientales y de propiedad intelectual. La presidenta subrayó que su gobierno está comprometido en mantener una comunicación abierta y productiva en torno al tratado, asegurando que su implementación siga beneficiando a todos los involucrados.
Donald Trump promete presión sobre México en caso de ganar
Por su parte, el candidato republicano y expresidente Donald Trump declaró recientemente que, en caso de recuperar la presidencia de Estados Unidos, aplicará una política firme para enfrentar los temas de migración y seguridad fronteriza. Durante un evento con simpatizantes en Raleigh, Trump señaló que, si resulta electo, exigirá a la presidenta Sheinbaum Pardo que controle el flujo de migrantes y el tráfico de drogas hacia territorio estadounidense. De lo contrario, advirtió que impondrá una tarifa del 25 % a las exportaciones mexicanas.
«Si no detienen este embate de criminales y drogas que vienen a nuestro país, voy a imponer inmediatamente una tarifa de 25 % a todo lo que envíen a Estados Unidos», afirmó Trump. Estas declaraciones reflejan una postura similar a la que mantuvo en su mandato anterior, cuando instó al gobierno mexicano, entonces encabezado por Andrés Manuel López Obrador, a implementar políticas estrictas de control migratorio.
Trump también hizo referencia a su percepción de Sheinbaum como «una mujer amable», aunque ambos no han tenido oportunidad de conocerse personalmente. Cabe recordar que Trump previamente presionó a López Obrador para que adoptara el programa «Quédate en México», mediante el cual se obligaba a los migrantes a esperar en territorio mexicano mientras sus solicitudes de asilo eran procesadas en Estados Unidos. Este programa fue desmantelado durante la administración de Joe Biden, marcando una diferencia en la política migratoria de ambos partidos en Estados Unidos.
Perspectivas para el futuro de la relación México-Estados Unidos
El próximo presidente o presidenta de Estados Unidos enfrentará el reto de continuar la colaboración con México en temas tan diversos como la migración, la seguridad y el comercio. La postura de Sheinbaum Pardo es clara: mantener una relación de respeto y fortalecer el trabajo conjunto en áreas de interés mutuo, especialmente en el marco del T-MEC. No obstante, la posible victoria de Trump podría suponer un cambio en la dinámica binacional, con un enfoque más agresivo en temas de seguridad fronteriza y control migratorio.
Sin importar el resultado electoral, el vínculo entre México y Estados Unidos seguirá siendo una de las prioridades para la administración de Sheinbaum Pardo, quien se ha comprometido a velar por los intereses de México mientras fomenta una cooperación efectiva con el gobierno estadounidense.
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